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Vince y Manu en Argentina:
La Patagonia - Calafate y el Parque Nacional de los Glaciares!

A penas llegamos a Calafate y vemos que el mundo del trekking está presente por todas partes. Tiendas, agencias de viajes,. Calafate, (cuyo nombre viene de una planta patagónica de la cual se elabora un licor que les digo que es muy buena.) parece ser el punto de partida de la exploración de la región además de ser un pueblo muy turístico.

Al día siguiendo nuestra llegada, tenemos nuestra primera excursión al Glaciar Perito Moreno, el más famoso de los 13 glaciares argentinos en el parque nacional de los glaciares, reconocido como patrimonio mundial de la Humanidad por el UNESCO. El tiempo es relativamente lindo, el trekking sobre los glaciares va a ser bueno. Desde el bus que entra en el parque nacional, vemos por primera vez (bueno yo, porque Manu ya vino.) el glaciar, pared de hielo impresionante erecta sobre el lago. Es gigantesco, sus dimensiones dejan mudo: lo que podemos ver es una lengua de hielo de 15 kilómetros de hondo (el glaciar mide alrededor de 30 Km . desde la parte continental); su ancho sobre el lago es de 5 kilómetros y sus "paredes" con más de 60 metros de altura, caen verticales en el lago que tiene un color azul lácteo, por los minerales que el glaciar arranca al suelo y que suben a la superficie poco a poco en el hielo mismo. Un panorama inolvidable! 

Bajamos del minibús y tomamos el barco que nos lleva más cerca de las paredes de hielo. El color del hielo cambia de blanco más luminoso al azul más profundo (lo más que el hielo es comprimido, lo más azul se vuelve). ¡El juego del sol en el hielo y la variedad increíble de los colores son fantásticos! Nos sentimos bien chiquitos en este entorno.Pasamos una hora totalmente incrédulos, en especulaciones para saber que pedazo de hielo se va a caer en el lago. El ruido es ensordecedor cuando un bloque de hielo se deshace de su pared. Unos iceberg rodean el barco. ¡Estamos en un mundo de hielo hermosísimo!

Bajamos del barco y empezamos a seguir nuestro guía que nos da miles de comentarios. Ponemos garras a nuestros zapatos y ¡a caminar sobre el hielo! Un paseo agradable y sorprendente. Nos encontramos con cavernas de hielo, grietas llenas de agua, que parecen echarse hasta lo más profundo en la tierra, quiero decir, ¡del hielo! Con burbujitas de aire que suben. ¡que fascinante!

A la vuelta, paramos sobre unas pasarelas instaladas frente al glaciar para disfrutar de la vista, sin cansarnos. Un glaciar, es una estructura en perpetua evolución, el Perito Moreno avanza de casi dos metros cada día, según lo que nos informa el guía. El tiempo allí sigue el compás del ruido tremendo de las paredes que se derrumban lentamente, cayendo a pedazos en el agua. A veces, unos bloques, que parecen minúsculos con los binoculares, hacen un ruido tal que da la impresión que el glaciar entero se derrumbó. Cada día caen así toneladas de hielo en el lago, y centenos de iceberg que se ponen a flotar sobre el agua azulado, dejando a la vista algo como un octavo de su volumen. El Perito Moreno es uno de los últimos grandes glaciares en estado de avance en el mundo, es un espectáculo único, inolvidable.

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